DOMINGO 18/5 3ª ETAPA: BEN SLIMANE – camino de EL KHATOUAT (60km / 4h 05min) Luzatu egin da nahikotxo agurra, oso pertsona onak dira, primerakoak. Pena handia da gizonezkoa izatearren, besarkada goxo eta luzea ezin izan ematea Habibari eta Aminari; Maryanekin ere, umea izanik, zail jartzen dizute, Hamadari baino ez eman ahal izan diot. Erdizka egiten dudanaren inpresioarekin joan naiz, kaltegarriak dira erlijioak, oso! Gure buruaren jabe egin dugu, azkenik, eta Martaren eskua askoz hobeto dago. Orain dela sei urte ibilitako eta ahaztutako bidea ari gara egiten, eta gaur, lehenengo baina zoritxarrez, ez azkenengo aldiz, higaduraren ondorio hondatzaileaz ohartuko gara. Baso eta lur aberatsa barik ari dira geratzen. Gaurko “katerina”, Aminaren esku, hobezina. Nos levantamos a las 9, no queremos salir tarde. Comemos algo de fruta, que están acompañados hoy de unos deliciosos y atómicos crepes. La sesión de fotos no hay quien la perdone, y es finalmente la una cuando salimos, con dos “túper”, con ensalada de arroz el uno, y albóndigas en otro, ambos gentileza de Amina. Es una mujer muy agradable, tiene una maravillosa forma de sonreír, desprende alegría. Habiba es más seria, aunque también tiene una bonita sonrisa. De Hamada nos hemos despedido por la mañana, da pena hacerlo también del resto de su familia. Les doy un paseo en bici a los críos, sin poder evitar el enfado de Amin, porque el de su hermana ha sido más largo. Es una pena que las costumbres de este país me impidan dar un buen par de besos y un abrazo a las dos mujeres, hay que conformarse con un apretón de manos. El sol calienta cuando estamos ya en ruta, pero nada comparable a lo de los dos primeros días. Hay grandes extensiones de cereal, de rastrojo otras y extensos terrenos sin nada o quemados, supongo que para conseguir zonas de pasto para las ovejas. En algunas lomas se aprecia perfectamente hasta dónde llegó el fuego; más allás, bosques de encina, ¡una pena! Llegamos a Sidi Bettache sin novedad, compramos pan, y como el wifi llega ya a todos los rincones del mundo, aprovechamos el de una cafetería para mandar algunos correos, mientras comemos la extraordinaria ensalada preparada por Amina. Creo que hemos desaprovechado una gran oportunidad de aprender cocina marroquí de una (más bien, dos) profesionales. Y aunque a la sombra el aire es fresco, hace aún calor cuando reanudamos la marcha. El perfil es ondulado, y aunque las pendientes no son fuertes, se van acumulando. Hace seis años llegamos hasta El-Kkatouat, pero estábamos seis años más fuertes. No va a resultar sencillo acampar, la falta de vegetación y el relieve, no lo ponen fácil. Y en una curva, aprovechamos un sendero para desviarnos a investigar. Los efectos de la erosión son impresionantes, la lluvia arrastra toda la tierra, el terreno está absolutamente agrietado y socavado. Damos con una pequeña explanada, es perfecta. Hay pocos árboles, pero el sol está ya bastante bajo, son casi las 19:30, y aunque nos ven un par de paisanos, van a ser las únicas visitas. Para cenar, seguimos disfrutando de la magia gastronómica de Amina, esta vez son las albóndigas no sé de qué son, no es carne, pero la salsa está deuntapanimoja. Ha refrescado un poco, creo que vamos a dormir perfectamente. Nos apetecía ya esta sensación de independencia. |
LUNES 19/05 4ª ETAPA: camino de EL KHATOUAT – camino de MOULAY BOUZZA 76km / 5h 10 min Gogorra ere gaurkoa, atzoko bezalakoa, gora eta behera suabe, baina atsedenik ez. Ez-Zhiligatik bost kilometro haratago, bai gozatu dugula 13 kilometroko jaitsieraz. Paisaiak aldatu egin du, harrizko mendiak eta sakabanatutako harkaitz handiez muinoak ditugu inguruan, han gustukoak dugun horietakoa! Pena argia, ez da batere ona inoz. 2008ko bidaian erreka beraren ondoan hartu dugu atsedena baian, garai hartan askoz ur gehiago zuen. Hemos descansado muy bien, no ha hecho nada de frío y hemos disfrutado de uno de esos desayunos reposados y abundantes que tanto apreciamos. hace calor cuando salimos, pero en la bici no se aprecia tanto. Queda atrás el cruce hacia El-Khatouat, no nos abandona ni el trigo, ni el rastrojo. Observando a las personas que viven aquí, nos damos cuenta de que nos ha alojado estos días una familia de “clase media” marroquí: los chavales cuidan del ganado (ovejas, cabras, vacas), el agua hay que subirla de los pozos, las mujeres rascan la tierra en busca de no sabemos qué, las casas de adobe en medio de la nada, el duro trabajo de recolección del cereal, acarreo de los fardos con el burro como medio de transporte, el vestir humilde,... ¡Dura vida! En Ez-Zhiliga llevamos hechos ya 53 km y aunque ya ha caído unos de los dos sacrílegos sobres de jamón de Teruel, en un restaurante comemos 200gr/cabeza de carne a la brasa y ensalada. Seguimos camino descansados y con reserva de agua, que hay que acarrear en 5 km rompe piernas que nos llevan a la parte de la ruta marcada en verde en el mapa, 13 agradables kilómetros de descenso que nos dejan junto al lecho de un río que lleva aún un poco de agua. Nos rodean las montañas, pobladas de encina y acacias, un buen lugar para descansar, cosa que hacemos cuando aún no son las 19:00. La ducha, la cena, el diario,... ponen fin a una buena jornada de pedaleo. Hoy ha refrescado menos, quizás porque no se ha levantado viento. |
MARTES 20/05 5ª ETAPA: camino de MOULAY BOUAZZA – más allá de TAZTOT 52km / 4h 20 min Aurreko egunetan bezala, gorabeheratsua da bidea eta zereala gehiago izan arren, artea ere zabaltzen da mendietan. laborariek igitaia erabiltzen dute oraindik, atzera eramaten gaituen irudia. Chispeaba un poco esta mañana, pero la temperatura ahora es perfecta para pedalear. Con poco más de 16km, dejamos atrás Sebt Ait, que no nos proporciona más que un té con el que acompañar nuestro pan y aceite. Rebasamos Moulay Bouazza, un pueblo grande con una también grande rampa de salida. Seguimos ascendiendo y descendiendo y aprovechamos la sombra de una gran encina entre tanto cereal para acabar con el sacrílego jamón turolense. La gente es amable, saluda desde los coches, nos fotografían, estamos cómodos. Y la suave brisa ayuda a convivir con el sol, que ya pega fuerte cuando se abre paso entre las nubes. La siguiente parada es Taztot, con ya 42km en las piernas, el lugar perfecto para hacernos con agua, tomar un té en un café con wifi y hacer alguna compra. Es un pueblo de tantos, abierto a ambos lados de la carretera, con muchas casas a medio construir aún y con el habitual aire decadente. El wifi y un zumo multifrutas nos entretienen un buen rato. No hay intención de pedalear mucho más, hasta las 7 como mucho, Khénifra lo dejamos para mañana. Y así es, apenas 5km más adelante, un camino sugerente se abre a nuestra derecha. El terreno es pendiente, pero el lugar tiene unas magníficas vistas. Ha quedado una tarde muy bonita, el cielo está despejado y el aire, fresco, no nos abandona. Como es habitual en este país, a pesar de la intención de pasar desapercibidos, siempre tenemos visitas, esta vez la de un paisano camino de su casa. |
MIÉRCOLES 21/05
6ª ETAPA: HASTA KHÉNIFRA
(51km / 3h 30min)
Etapa laburra baina gogorra, 2008ko bidaian igarotako paisaia eta herrietara eramango gaituena. Khénifra oso leku aproposa atsedena hartzeko suertatu da.
Teníamos que haber elegido un poco mejor el emplazamiento de la tienda, estaba demasiado inclinada y no hemos descansado bien. Además, ha hecho viento esta noche. Como es habitual, amanecemos hacia las 8 y en dos horas estamos en movimiento. Hace fresco, salimos con el chubasquero, aunque nos lo quitamos en las primeras rampas. Un pastor nos ofrece su casa para dormir, tarde.
Hacemos los 15km hasta Aguelmous con relativa comodidad, recordamos cómo en 2008, aquí mismo pedimos un té y nos sirvieron pollo asado. Estamos en un Marruecos más profundo, aquí ni siquiera nuestros pantalones anchos hasta las rodillas nos salvan de las miradas de los clientes del café. Podrían hacerse cientos de fotos son moverse del sitio.
6ª ETAPA: HASTA KHÉNIFRA
(51km / 3h 30min)
Etapa laburra baina gogorra, 2008ko bidaian igarotako paisaia eta herrietara eramango gaituena. Khénifra oso leku aproposa atsedena hartzeko suertatu da.
Teníamos que haber elegido un poco mejor el emplazamiento de la tienda, estaba demasiado inclinada y no hemos descansado bien. Además, ha hecho viento esta noche. Como es habitual, amanecemos hacia las 8 y en dos horas estamos en movimiento. Hace fresco, salimos con el chubasquero, aunque nos lo quitamos en las primeras rampas. Un pastor nos ofrece su casa para dormir, tarde.
Hacemos los 15km hasta Aguelmous con relativa comodidad, recordamos cómo en 2008, aquí mismo pedimos un té y nos sirvieron pollo asado. Estamos en un Marruecos más profundo, aquí ni siquiera nuestros pantalones anchos hasta las rodillas nos salvan de las miradas de los clientes del café. Podrían hacerse cientos de fotos son moverse del sitio.
Los 35km que nos separan de Khénifra van a ser duros, varias rampas, largas algunas, nos obligan a utilizar todo el desarrollo. Llegamos a la ciudad cansados hacia las 14:30, en el “Café Almería” nos dan las indicaciones -a pesar del nombre, en árabe- del “Hotel El Kamar”, junto al mercado. Es un lugar agradable, las habitaciones se abren en torno a un patio central. La habitación, con dos camas y ducha, cuesta 170dh. Nos quedaremos un par de noches, Khénifra es un buen lugar para descansar y callejear. Tras la ducha, salimos a comer al mercado (dos medios pollos y dos ensaladas bien surtidas, 60dh). Paseamos un rato, y vuelta a casa. Hay, cómo no, wifi, así que echamos la tarde descansando, escribiendo y respondiendo correos. Son las 8 cuando salimos de nuevo, la calle está a tope, compramos fruta y tomate para cenar en la habitación y nos dedicamos a pasear. Como cualquier otra ciudad marroquí, los comercios de todo tipo se abren por todas partes, está claro que el comercio da vida. De regreso al hotel, un repentino corte de luz retrasa la cena. Hasta mañana. |
JUEVES 22/05
KHÉNIFRA
Turismo eguna Khénifran
Hemos descansado bien, dsayunamos en la cafetería que tenemos frente al hotel café con leche y cuatro bollos bien ricos (19dh). Echamos un buen rato como la gente local, sentados y dejando pasar el tiempo y, por supuesto, de nuevo “enchufados” a internet, va a hacer falta una clínica de desintoxicación, no se puede estar siempre conectado.
Paseamos, en una plaza encontramos coches de rally aparcados, parece que hay una carrera, sólo espero que siga un camino diferente al nuestro. El paseo acaba en la misma terraza, con un buen zumo de naranja en la mesa (8dh). Comemos hoy en el mercado, un tallin de carne muy rico (30dh). Al otro lado del río seguimos reposando junto a un “cafe noir”, viendo pasar el tiempo y a la gente. Se podría hacer miles de fotos.
Nos retiramos a la habitación para descansar físicamente, que no psíquicamente, porque no nos desconectamos de la red en ningún momento: guatxaps, correos, hoteles en Fez, Meknes,… Vamos definiendo el itinerario, iremos probablemente a Mouley Idriss y al norte después, entrando a Fez. Poco a poco.
Hacia las 8 salimos a comprar frutos secos (dátiles, almendras y cacahuetes). En la guía se dice que el zoco es un espacio para las relaciones sociales (compras, charla, flirteo,…) y así debe ser porque, como es habitual, está a tope. Nos acercamos desde aquí a un restaurante que vimos ayer y que nos pareció un buen ligar para la cena. Optamos por filetes de carne picada, 4 salchichas y 4 pinchos morunos de pollo, más ensalada, todo rico, como es habitual. La sorpresa llega con la cuenta: 120dh. Se lo hacemos saber al tipo, que coge la habitual rabieta de quien se sabe pillado y se defiende malamente, a gritos. Pero hemos cometido el error de darle el dinero y no hay vuelta atrás,. Es una pena, porque este tipo de gente te amarga una jornada perfecta.
Nos retiramos. Para mañana se anuncia un día espléndido.
KHÉNIFRA
Turismo eguna Khénifran
Hemos descansado bien, dsayunamos en la cafetería que tenemos frente al hotel café con leche y cuatro bollos bien ricos (19dh). Echamos un buen rato como la gente local, sentados y dejando pasar el tiempo y, por supuesto, de nuevo “enchufados” a internet, va a hacer falta una clínica de desintoxicación, no se puede estar siempre conectado.
Paseamos, en una plaza encontramos coches de rally aparcados, parece que hay una carrera, sólo espero que siga un camino diferente al nuestro. El paseo acaba en la misma terraza, con un buen zumo de naranja en la mesa (8dh). Comemos hoy en el mercado, un tallin de carne muy rico (30dh). Al otro lado del río seguimos reposando junto a un “cafe noir”, viendo pasar el tiempo y a la gente. Se podría hacer miles de fotos.
Nos retiramos a la habitación para descansar físicamente, que no psíquicamente, porque no nos desconectamos de la red en ningún momento: guatxaps, correos, hoteles en Fez, Meknes,… Vamos definiendo el itinerario, iremos probablemente a Mouley Idriss y al norte después, entrando a Fez. Poco a poco.
Hacia las 8 salimos a comprar frutos secos (dátiles, almendras y cacahuetes). En la guía se dice que el zoco es un espacio para las relaciones sociales (compras, charla, flirteo,…) y así debe ser porque, como es habitual, está a tope. Nos acercamos desde aquí a un restaurante que vimos ayer y que nos pareció un buen ligar para la cena. Optamos por filetes de carne picada, 4 salchichas y 4 pinchos morunos de pollo, más ensalada, todo rico, como es habitual. La sorpresa llega con la cuenta: 120dh. Se lo hacemos saber al tipo, que coge la habitual rabieta de quien se sabe pillado y se defiende malamente, a gritos. Pero hemos cometido el error de darle el dinero y no hay vuelta atrás,. Es una pena, porque este tipo de gente te amarga una jornada perfecta.
Nos retiramos. Para mañana se anuncia un día espléndido.