MIÉRCOLES 25/07 1ª ETAPA: KALAIKHUM – KURGOVAD (58km/5h) Aurrerantzean topatuko dugunaren kezkak ez gaitu utziko. M41etik ibili gara, gertuko Kyrgyzstanera eramaten duen errepide nagusia, kontrakoa iruditu arren, bere egoera kontuan izanik. Panj ibaiaren bestaldean, Afganistan bere ondo zaindutako herrixkekin. Gurean ere herrixkak zeharkatu egin ditugu, pobreak oso, mendietatik jaisten diren ibai edota erreken inguruan sortuta. Etapa osoan, jaitsierak eta aldapa zailak izan ditugu bata bestearen atzean, bidearen egoera eskasak eguna gogortuz. Noizbehinka, lur-jauziak botatako arroka erraldoiak topatzen ditugu bidearen erdian, kamioi handi bat nekez pasatuko da handik. Bidaia honen lehendabiziko zikloturista ezagutuko dugu, Chris izeneko suitzar gaztea. Eta bidaiaren lehendabiziko ezbeharra ere izango dugu, gasolina-ihesa sukaldean. Nuestro anfitrión está bastante preocupado, ayer oyó en el informativo que ha habido 10 muertos en la zona de Khorog. Esta mañana, mientras desayunamos, ponemos el “teleberri”, pero ni siquiera mencionan el tema. Con los preparativos hechos y pasada la prueba de la letrina, nos disponemos, a pesar de todo, a marchar. El control que ayer había en el cruce ha desaparecido, así que vamos más tranquilos. Llegamos a otro de policía y ejército pocos kilómetros más adelante: unos dicen que la carretera está cortada en Khorog, otros, que no hay problema. Seguimos pues y al poco rato nos topamos con Chris, un cocloturista suizo (¡cómo no!) que se nos acerca con las mismas malas noticias confirmadas por unos camioneros con quienes comparte un té. Aún así, seguirá camino confiando en que la situación mejore. El río Panj es poderoso, aguas color chocolate, rápidos que a más de uno le pondrían los dientes largos. Dos motoristas austriacos se detienen junto a nosotros, tienen las mismas noticias. Más tarde, mientras comemos, lo hacen también dos 4x4, el conductor de uno de ellos habla de 25 muertos ya en las calles de Khorog, la carretera está cortada allí, pero es posible que podamos llegar hasta Rushan. Desde allí, subiríamos por el Bartang Valley para bajar a Murghab (es decir, en sentido opuesto a lo planeado) e informarnos allí de la situación en Khorog. Si hubiera cambiado, regresaríamos hasta esa ciudad por el Gunt Valley y después, en función del tiempo disponible, valoraríamos si regresar a Dushanbe en bicicleta o en taxi; y si siguiera mal, siempre quedaría la opción de regresar a Kalaikhum por el mismo camino, es decir, Bartang Valley. Con esta opción de Rushan, aunque no demasiado tranquilos, proseguimos. Con algo más de 50km nos detenemos en Kurgovad, decidimos que éste puede ser un lugar tan bueno como otro para acampar. Son poco más de las seis de la tarde. Con todo más o menos organizado, una ducha y cuando nos disponemos a cenar, comprobamos que la cocina pierde gasolina por la llave. Nos cuesta dar con el motivo y cuando lo hacemos, no parece que vaya a tener fácil solución. El disgusto y el cansancio nos quitan el apetito, sólo cenamos un trozo de pan. En la tienda, discurrimos que un poco de cinta americana podría resolver el problema. Pero eso queda para mañana. |
JUEVES 26/07 2ª ETAPA: KURGOVAD – DASHKAT (40km/3h 30min) Atzo bezala, errepide gogorra eta eskasa topatu dugu baina, atzo bezala ere, bideak ikuspegi zoragarriak eskaini dizkigu. Bailara, estua orain arte, zabaldu egiten da hondarrezko eremu batean non Panj ibaia begien bistatik galtzen dugun. Beste bi zikloturistekin egin dugu topo, Dominique eta Janine, suitzarrak haiek ere bai. Haiekin partekatuko dugu gaurko etapa, 10km atzera eginez bukatutzat eman beharko duguna, Dashkat herrian. Poliziaren kontrol batean esandakoaren arabera, Khorogeko istiluak uste baino askoz larriagoak omen dira. Eta beste hiru lagunakin gaua partekatzeak ematen duen lasaitasunarekin, herri honetako ibilbidea birplanteatzea da aukera bakarra. El truco de la cinta americana funciona bien y nos permite preparar el desayuno. Con la jornada apenas iniciada, aparecen dos cicloturistas más, Dominique y Janine una pareja suiza, por supuesto. Como nosotros, tienen noticias inciertas sobre la situación en Khorog. En plena conversación, aparece un 4x4, confirman el tiroteo en Khorog, que la situación es complicada, pero que la opción de Rushan sigue abierta, así que decidimos continuar. El estrecho valle, de paredes escarpadas, se abre ampliamente poco después. Unos tramos de descenso bastante complicados nos llevan hasta una zona de aspecto desértico, con arenales y fuerte viento en contra que complican el avance. Llegamos así a un puesto de control de la policía y el ejército donde nos volvemos a reunir con Chris. Tras el control de pasaportes, el suizo nos dice que la falta de comunicación es absoluta y la información, muy confusa, tan pronto nos animan a seguir como dicen lo contrario. Pero finalmente parece que no va a haber más remedio que dar media vuelta, pues nos dicen que se ha estado combatiendo también en Rushan esta pasada noche. |
Junto al puesto de control, hay un modesto restaurante donde compartimos un té y la toma de decisiones con respecto al viaje. Nosotros lo tenemos fácil, sólo hay que regresar a Dushanbe (pedaleando), para acercarnos después hacia el norte, acercándonos al vecino Uzbekistán, los suizos nos hablan de un bonito valle en esa zona. Ellos lo tienen más complicado, quieren ir a China y el visado piensan pedirlo en Bishkek, en Kyrgyzstan, y resulta que el paso fronterizo al vecino país está cerrado por el conflicto; existe otra entrada, pero parece ser que sólo puede utilizarla la gente local. Además, andan agobiados por la fecha de finalización del visado en Tajikistán. Nos enteramos también de que hay un grupo de 30/40 turistas (unos cuantos en bicicleta, al parecer) atrapados en Khorog y que deberán ser evacuados por organismos internacionales. Mientras llega ese momento, esperan en un hotel, sin poder salir. Y llega entonces un mini-bus con 10 ó 12 soldados armados hasta los dientes y con señales evidentes de cansancio. Mientras Chris se hace una foto junto a los militares, queda meridianamente claro que lo lógico es alejarse lo antes posible, cosa que hacemos junto a la pareja suiza en cuanto cesa la tormenta. Hoy haremos noche juntos, vamos a estar más tranquilos así. Dejamos atrás a Chris, no sabemos por qué, parece a gusto con los soldados. Retrocedemos algo más de 10km y en Dashkat unos jóvenes nos ofrecen posada, cosa que aceptamos. Y mientras comemos algo, unos jóvenes se acercan, gritando, han visto a un 5º ciclista que resulta ser Chris. La jornada ha sido calurosa al final. Dominique y Janine montan la tienda por miedo a los mosquitos. Nosotros únicamente desplegamos los sacos, no parece que los bichos alados vayan a ser un problema esta noche. Chris monta su tienda en el “jardín”. Y hasta mañana, que el día ha sido intenso. |